Volver al Blog

😱😳 Debes rendirte ya

Quiero hablarte de una cosa que he interiorizado en un evento presencial que realicé en enero. Ya me la sabía, pero no había calado lo suficiente como para que hubiera cambios reales en mí.

A priori, siempre digo que hay que ser guerreras, que hay que ponerse en acción y hacer un montón de cosas, que no podemos bajar las manos. Todo esto es absolutamente cierto, pero también es cierto que hay una cosa muy curiosa y muy importante que hay que plantearse.

La rendición.


¿Qué es esto de la rendición?, pues es que, a pesar de que quieras mejorar tu situación, aprender cosas nuevas, trabajar por tu negocio, tener más abundancia, mejorar en la vida, antes de empezar siquiera a intentar conseguir lo que quieres conseguir, tienes que rendirte ante lo que pase, ante el resultado, ante tu situación actual. 

Imagínate que ahora mismo estás viviendo una experiencia mala en tu negocio, una época en la que tienes pocos clientes y quieres cambiarlo, entonces empiezas a ver mis vídeos o a hacer un curso para cambiar esas cosas. 

Perfecto.

Pero para que todo fluya realmente, tienes que rendirte primero.

¿Cómo se hace eso?, ríndete a la situación actual.

Tienes que decir: acepto esta situación que tengo en este momento en el que no tengo clientes, en el que no facturo todo lo que quiero o en el que a lo mejor estoy desbordada de trabajo, acepto este momento, acepto esta situación, porque esta situación está aquí porque tiene que estar aquí, porque gracias a esta situación puedo darme cuenta de…

O puedo aprender que…

(incluso algo que todavía no sé)


Desde el momento que aceptas y te rindes ante esta situación que estás viviendo, y aunque tú todavía no lo veas, es perfecto esto que te está pasando.

No significa que no lo cambies, pero primero tienes que rendirte ante esta situación. 

La diferencia de un cambio basado en la rendición, a un  cambio basado en la lucha, es crucial.

Si este cambio lo sacamos desde: es que esto no me gusta, es que esto está mal, es que no me lo merezco, odio esta situación, ¿por qué a mí?, pobre de mí….

Si el cambio sale desde ahí, no es un cambio desde la abundancia, desde un buen enfoque. Es un cambio desde la escasez, desde el dolor.

Cambiar una situación extrema, una mala relación de pareja, algo que te pasa en tu familia, o en tu negocio, si el cambio lo vives desde esa situación de dolor, de agobio, de escasez, va a ser un cambio complicado, va a ser un cambio que te va a costar mucho esfuerzo, va a llevar muchísimo tiempo, te va a llevar dolor, va a llevar sufrimiento.

Si este cambio lo haces desde aceptar tu situación, me rindo ante la vida, esta situación es perfecta y busco este cambio. Pero ese cambio desde la mejora, no ese cambio desde la necesidad tremendamente dolorosa de cambiar. 

No sé si te ha pasado, pero si has vivido algo fuerte en tu vida, han pasado  muchísimos años que estabas (o estás todavía) diciendo, es que esto es horrible, como me ha pasado esto a mí…

Pero si lo piensas profundamente, dejando atrás el dolor o si tienes algo de desarrollo personal, te darás cuenta de que en esa situación aprendiste algo, de que en esa situación forjaste una parte importante de lo que eres hoy, o que gracias a aquello con lo que tanto sufriste hoy estás en otro nivel.

No sé cuánto me conoces, pero he vivido situaciones en la vida muy dolorosas, situaciones de maltrato, enfermedades de mis hijos…  en ese momento y durante muchos años no le vi nada positivo, pero luego, desde el punto de vista del futuro, ves hacia atrás y reflexionas no, es que con esto aprendí esto, esto y esto, y yo soy la persona que soy gracias a eso. 

En un momento determinado, nos cuesta ver por qué esto que está pasando ahora es bueno para mí o rendirnos a esta situación. 

No esperes a que pasen años para darte cuenta de que has aprendido de eso y que en el fondo pues fue una situación que le has sacado muchísimo partido.

La vida está ahí para ti, está para enseñarte, está para apoyarte, está para que crezcas, para que te desarrolles, entonces te digo hoy: ríndete ante la vida, ante la situación que tengas, aunque sea mala, y desde esa rendición comienza un cambio. 

Pero no desde la lucha, no desde el odio, no desde el dolor, sino rindiéndote ante la vida, aceptando la situación que estás viviendo hoy que por alguna razón todavía no sabes qué va a provocar en ti, en qué te va a ayudar, cuál va a ser el cambio que vas a tener. 

Porque todavía no lo vemos, porque estamos dentro de ese momento, pero ríndete y de ahí provoca un cambio, un cambio con paciencia, con resiliencia, no con lucha, no con guerra, no con revelación. 

Acepta el problema que tengas ahora, acepta la enfermedad que puedas tener ahora, la situación que puedas tener ahora. Ríndete ante lo que puede estar enseñándote esta situación que a lo mejor ahora desconoces. 

Y a partir de ahí toma acción, porque sin acción no hay cambio.

Acción desde esa rendición, sin lucha, con aceptación.

Estas son las cosas maravillosas que interiorizas en un evento presencial. Es un evento de alto impacto pensado para provocar cambios reales en tu vida. El próximo será en septiembre. No te lo pierdas, vente conmigo.

ENERGY

Más información en este enlace: ENTRA AQUÍ