🧠🤯 Estados emocionales
¿Cuál es la diferencia entre una chica quejándose, un avestruz y una karateka?
¿Comparaciones raras, verdad? ¿Y si con estas comparaciones supieras cómo gestionas actualmente tus problemas, y si eso te beneficia o te lastra?
Te explico…
Imagina un muro y delante del muro, estas tres figuras: la chica quejándose, el avestruz y una karateka.
Ahora imagina que el muro representa los problemas que nos pasan a diario y la chica quejándose, el avestruz y la karateka, representan la forma que tenemos de gestionar ese muro.
La chica quejándose representa a una persona, que gestiona el muro, permaneciendo en un estado emocional de víctima.
La víctima se cuenta historias del porqué no cumple sus objetivos y culpa a otros de sus desgracias. Se pasa el tiempo, culpando al estado por los impuestos, a la pandemia por sus tropiezos, a la competencia por sus bajones… todo esto es cierto, es una realidad, lo es para todos. Pero mientras sigas justificando tus resultados por las cosas externas, no va a haber cambios. En este estado mental no consigues resultados. ¿Por qué? Porque no pasas a la acción. Porque te cuentas historias para justificarte.
El avestruz representa a una persona, que gestiona el muro, permaneciendo en estado emocional de avestruz.
El avestruz cuando tiene algún problema mete la cabeza dentro de un agujero o corre rápido, y cree que con eso evitó el problema. Esto hacemos cuando tenemos problemas en nuestro negocio, ponemos la cabeza en otro sitio para olvidarnos y no afrontamos, así como el avestruz, nos volvemos muy optimistas pensando que siempre todo va a salir bien, y en realidad solo procrastinamos las cosas, dejamos de hacer las tareas que nos causan dolor, y hacemos una y otra vez lo mismo, entonces, obtenemos los mismos malos resultados. En realidad no pasamos a la acción, porque esperamos “el mejor momento”.
La karateka representa a una persona, que gestiona el muro, permaneciendo en estado emocional de guerrero.
¿Qué hace el guerrero? El guerrero avanza. ¿Recuerdas el muro? Vale, pues el guerrero, sabe que ese muro es un problema. El guerrero no agacha la cabeza, tampoco corre de sus rivales. Al contrario, analiza como vencerlos, lo mismo en los negocios, cuando estás en estado emocional de guerrero, analizas como vencer los problemas y cumplir tus objetivos, pero no con una solución, buscas cuatro o cinco alternativas, incluso si fracasas, sigues buscando, así son los guerreros. Cuantos más problemas soluciono, más valor tengo. Todo es cuestión de perseverancia y de resiliencia.
¿Cómo afrontas tus problemas a partir de hoy? Quejándome continuamente, escondiendo la cabeza sin pasar a la acción, ¿o como un guerrero?.
